jueves, 5 de marzo de 2009

¡¡El yacimiento prehistórico de Chaves ha sido destruido!!

Kamoya Kimeu es el jefe de la banda de los homínidos. No se trata de un grupo musical, sino de un grupo de rastreadores que tienen un olfato que te cagas buscando fósiles en los yacimientos del Este de África. Él, trabajando para el equipo de los Leakey, ha realizado hallazgos verdaderamente espectaculares, como por ejemplo “el Niño de Nariokotome”, ese homo erectus del lago Turkana que murió siendo todavía un zagal. En esos grandes yacimientos al aire libre es normal proceder así. Cada año el viento y la lluvia pueden dejar expuesto un nuevo fósil justo donde el año anterior te habías echado una meadilla sin ver nada.


Cueva de Chaves (Bastarás, Huesca).

Ahora, Vicente Baldellou, director del Museo Provincial de Huesca y codirector de las excavaciones que desde hace años se venían realizando en la cueva de Chaves va a poder hacer lo mismo pero en plena Sierra de Guara. Simplemente tendrá que esperar a que pase la estación de las lluvias y acercarse a lo que supongo será una enorme terrera, no muy lejos de esa grandiosa cueva, para ir metiendo en una bolsa trozos de cerámica cardial, punzones, taladros, brazaletes, colgantes, huesos de animales domésticos o aún humanos de hace 6800 años, granos de cereal calcinados. Y es que el yacimiento de Chaves, el más importante yacimiento del “neolítico puro” de Aragón y uno de los más importantes de España se ha ido a cascarla… ha desaparecido. No es que haya sido abducido por una desamalda pandilla de extraterrestres que pasaban un día de picnic y tortilla de patata en la Sierra de Guara, no…, simplemente ha sido vaciado por un humano a los mandos de una pala excavadora. Así de simple. Se ha sabido ahora, aunque parece que ocurrió hace más de un año. ¿Cómo es posible? ¿Cómo es posible que en un yacimiento insignia de Aragón se haya producido tal cosa y que nadie reparara cuando estaba ocurriendo o incluso tanto tiempo después de que ocurriera? ¿Qué grado de protección tenía? O mejor dicho ¿tenía algún grado de protección? La Diputación General de Aragón tendrá algo que decir, y quizás se recuerden cosas que si bien no apuntaban directamente a que esto era algo que podía pasar, sí indicaban que hay gente que hace lo que le sale de las pelotas ante la indiferencia de las instituciones. Y cuando uno hace ciertas cosas porque le salen de las pelotas –y le salen bien- puede llegar un día, y ha llegado, que haga otras.
Desde hace décadas la cueva de Chaves está dentro de un coto privado de caza de más de 1500 Ha., que a su vez está dentro de un Parque Natural, el de la Sierra de Guara. El coto fue cercado en la década de los 70 argumentando razones de furtivismo. Dentro de él quedaron Chaves y la Cueva de Solencio, una gruta de 8.2 Km de desarrollo con cuatro lagos interiores. Desde entonces arqueolocos y espeleolocos han estado a expensas de la voluntad y del calendario de tiros de los sucesivos propietarios para acceder a ellas, y cuando en 1990 se creó el Parque Natural parte del coto quedo dentro del área protegida, pero el cercado, de 2,60 m. de altura quedó en pie. En repetidas ocasiones se ha dicho que el vallado es ilegal, que no se adapta a las estipulaciones de la ley sobre conservación de espacios naturales ni a la ley de caza, impidiendo el libre tránsito de especies cinegéticas y la circulación de la fauna silvestre, e impidiendo también el libre acceso al camino real que unía Huesca con Boltaña. En el año 2007 el Justicia de Aragón instaba a la DGA y al ayuntamiento de Casbas –y se puede leer en el Heraldo de Aragón del 20 de junio- a actuar de forma “urgente” para conseguir que la empresa propietaria retirara después de más de 30 años de incumplimiento ese vallado, que además se apropiaba de 270 Ha. protegidas del Parque. Así que en fin…, lo que pasa dentro del coto no lo sabe ni Dios.